"(...) había quien decía que el problema no era la mezcla de alumnos sino la confusión mental de los que la dirigían."
Las Crónicas de Narnia: La Silla de Plata de C. S. Lewis...
El ante-último libro de la serie que tanto me venía gustando.... Y digo venía porque lamentablemente, esta sexta parte me ha decepcionado bastante.
En cuanto a la trama, la he sentido bastante pesada, a pesar de que las escenas planteadas eran sumamente interesantes. He tenido que volver varías veces las páginas porque no podía recordar lo que había sucedido en capítulos anteriores... Es que, siento que esta vez ha dado muchas vueltas y ha repetido demasiadas veces algunas cosas, algo que no sucedía en los libros anteriores.
Sumemos a los protagonistas poco interesantes, no muy bien cerrados.
Eustace tenía mucha más forma, más personalidad, en el libro anterior; ahora ha perdido todo y se ha vuelto completamente plano.
Jill, compañera de Eustace, y una nueva protagonista para estas aventuras, tiene un atisbo de personalidad interesante; pero a mitad del libro entra en un juego donde ésta desaparece y regresa, convirtiéndola en un personaje tedioso e insoportable.
El meneo de la Marisma, Charcosombrío, intenta ser un personaje cómico, pero no lo logra, lo que da como resultado a alguien un poco molesto. Pero creo que es bastante importante, y el que más ritmo da a la historia.
El hijo de Caspian, el príncipe Rilian, es de los más invisible. Por poco no me doy cuenta que existe, no tiene ni la mitad de presencia que su padre.
En cuanto a los secundarios mejora un poco:
La trama que involucra a los gigantes es de las mejores partes, porque ellos están bien consolidados y son un tanto claros.
La mala de esta historia - que yo creo será la misma que era la Reina en libros anteriores- queda muy apocada, por nada en realidad. Simplemente no tiene suficiente relevancia en la historia.
Los enanos subterráneos son algo aburridos, mejor ni compararlos con los seres de un solo pie del libro anterior.
Si hablamos de Aslan, pues este libro contiene su peor aparición. No es nada interesante y es apenas llamativa. No me ha gustado nada.
Por último, pienso que se podría haber explotado mucho más el tema de la silla de plata, y no dejarlo en un solo capítulo, con importancia prácticamente nula. Al igual que el misterio de la identidad del "caballero negro", como lo llaman en un momento.
Espero que el siguiente libro salve el final de la historia que venía bastante bien como para dejarme ahora con un mal sabor de boca. Habrá que ver.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario